¿Qué es una hernia discal?
El dolor de espalda es uno de los tipos más comunes de dolor y suele ser muy molesto e incapacitante. El dolor de espalda solo es una enfermedad peligrosa en pocos casos y suele desaparecer solo. Sin embargo, este no es siempre el caso.
En aproximadamente una persona de cada cinco, el dolor se mantiene a largo plazo. El dolor continuo puede deberse a una enfermedad llamada degenerativa, que puede resultar en una hernia discal.
Una hernia discal ocurre cuando la «gelatina» blanda dentro de un disco intervertebral se desplaza mediante una rasgadura hacia el exterior del disco.
¿Cuáles son los síntomas de una hernia discal?
Los síntomas de una hernia discal suelen incluir el dolor de espalda, pero también se producen otros síntomas como la fiebre, la fatiga y la pérdida de peso. Si tienes alguno de los siguientes síntomas, consulta a tu médico:
- Si el dolor de espalda ha durado semanas y aumenta constantemente
- Si también te duele una pierna o las dos
- Si tienes trastornos sensoriales en una pierna o en las dos.
Además, pueden aparecer varias enfermedades graves que requieren atención médica inmediata:
- Parálisis en una pierna o en las dos
- Pérdida de sensibilidad que afecta a los genitales
- Disfunciones en la vejiga o el intestino
Si tienes alguno de estos síntomas, deberías acudir al médico. El médico comprueba si hay una hernia discal realizando un escáner de RM. Un escáner de MR proporciona una imagen detallada del cuerpo, incluidos los huesos, cartílagos, ligamentos y tejido blando. También muestra los nervios y vasos sanguíneos.
¿Cuáles son las causas de una hernia discal?
La columna está formada por huesos o vértebras individuales unidos por ligamentos y amortiguadores elásticos llamados discos. Un disco consiste en tejido conjuntivo con un núcleo gelatinoso. Estos discos actúan como amortiguadores y permiten que se mueva la columna. La columna vertebral posterior contiene un conjunto de fibras nerviosas que conectan el cerebro con el resto del cuerpo. Este conjunto se llama médula espinal. Una hernia discal ocurre cuando el núcleo gelatinoso se abre paso a través del tejido conjuntivo del disco, formando un bulto que apunta a la médula espinal. El bulto a veces aprieta el conjunto de fibras nerviosas, lo que puede provocar varios síntomas.
La enfermedad suele afectar a la zona lumbar, pero también puede afectar al cuello o, en casos extraños, al pecho. El bulto puede deberse al envejecimiento, al trabajo físico intenso o a un traumatismo como una caída o un accidente de coche.
¿Cuáles son los tratamientos para una hernia discal?
A menudo una hernia discal se puede tratar sin cirugía, simplemente aliviando la tensión de la espalda. También es posible complementar el tratamiento con medicación, a menudo en forma de analgésicos. Además, la enfermedad se puede tratar con una rehabilitación apropiada cuando la intensidad de la enfermedad aumenta. Si un caso no se puede tratar de forma convencional, el daño al disco se puede arreglar con cirugía.
