¿Qué es glaucoma?
Glaucoma es un término colectivo utilizado para describir una serie de enfermedades diferentes, causadas por cambios en el nervio óptico. Los cambios generalmente darán como resultado un estrechamiento del campo visual, la llamada "visión de túnel", pero en casos excepcionales, también puede causar ceguera total. El glaucoma se divide en glaucoma agudo y crónico.
El glaucoma agudo es un aumento repentino de la presión ocular. Por lo general, se puede ver en personas con ojos pequeños, y aquí, un tratamiento de acción rápida es especialmente importante ya que la condición puede provocar ceguera en cuestión de días. El glaucoma crónico es el tipo más común de glaucoma, y como la enfermedad no presenta síntomas durante los primeros años, a menudo es diagnosticada "por accidente" por un oculista. Aquí, el especialista observará un nervio óptico blanqueado y potencialmente un problema con el campo visual. Un factor de riesgo importante es la presión ocular elevada.
¿Cuáles son los síntomas del glaucoma?
El glaucoma agudo se asocia con síntomas repentinos, como por ejemplo:
- Dolor de ojo
- Dolor de cabeza
- Náuseas y vómitos
- Visión borrosa
- Al ver anillos de colores del arcoiris
El glaucoma crónico no causa síntomas evidentes durante los primeros años. Más tarde, la presión ocular aumentada puede provocar síntomas, como:
- Rubor de la membrana mucosa del ojo
- Parches grises y 'apolillados' en el campo de visión
¿Cuáles son las causas del glaucoma?
En la parte frontal del ojo, hay un líquido acuoso denominado "humor acuoso". El humor acuoso es producido por el cuerpo ciliar y es un elemento importante para humectar el ojo. Hay una producción constante de humor acuoso, y por lo tanto, es importante que se elimine constantemente una cantidad correspondiente de fluido. El humor acuoso sale del ojo a través del ángulo de la cámara anterior.
El glaucoma agudo es el resultado de un bloqueo del ángulo de la cámara, lo que causa que el humor acuoso se acumule en el ojo. Esto hace que la presión del ojo aumente. Un aumento en la presión del ojo destruirá las células nerviosas, lo que intercepta la impresión visual y envía señales al cerebro a través del nervio óptico. Con frecuencia, la razón de este bloqueo del ángulo de la cámara es que el músculo que expande la pupila es hiperactivo. Este músculo es particularmente activo cuando estás en la oscuridad. Por lo tanto, el glaucoma casi siempre ocurre en entornos oscuros.
Se desconoce la causa de la forma crónica de glaucoma, pero muchos elementos apuntan a que la causa es una mala circulación sanguínea localmente cerca del nervio óptico. Se sabe que varios factores contribuyen a un mayor riesgo de desarrollar glaucoma y estos factores incluyen: disposición hereditaria, edad, miopía definida, lesiones en los ojos, iritis, presión arterial elevada y tratamiento a largo plazo con la hormona adrenocortical.
¿Cuáles son los tratamientos para el glaucoma?
El glaucoma agudo se trata en la oficina del oftalmólogo. Aquí, los pacientes con glaucoma recibirán gotas para los ojos que hacen que la pupila se contraiga. Esta contracción de la pupila permite reestablecer el drenaje del líquido y la presión ocular, reduciendo así el daño al nervio óptico. Cuando la presión es estable, puede ser necesario un tratamiento quirúrgico o tratamiento con láser que haga un agujero en la iritis hacia arriba, lo que permite un mejor drenaje del líquido del humor acuoso.
El glaucoma crónico se puede tratar de diferentes maneras. El tratamiento médico consiste en gotas para los ojos que reducen la producción de líquido o aumentan el drenaje del ojo. El tratamiento con láser puede aumentar el drenaje al hacer pequeños orificios en el ángulo de la cámara, y este tratamiento generalmente se ofrece si las gotas para los ojos no tienen el efecto deseado. Como último recurso, se puede usar cirugía ya que puede crear un drenaje artificial para el líquido debajo de la conjuntiva del ojo. Este tratamiento puede evitar que la condición empeore, pero no puede mejorar la visión.
